Con 38 jesuitas es la Provincia de la Compañía más pequeña del mundo. Los jesuitas atienden a una población muy secularizada en la República Checa, con su historia rica y compleja. El territorio se compone de dos zonas principales, Moravia y Bohemia, cuyas comunidades visitará el Padre General en noviembre: Olomouc, Svatý Hostýn, Velehrad, Brno, Děčin y finalmente la capital, Praga, donde se encuentra la Curia Provincial. El socio del Provincial, el P. Petr Havliček, nos habla de la historia de su país, que cuenta con unos 10,5 millones de habitantes, de su situación social y religiosa y, por supuesto, de la presencia y las obras de la Compañía de Jesús.

Situada en Europa Central -señala-, la República Checa perteneció durante mucho tiempo a los países bajo la antigua monarquía de los Habsburgo. Luego vinieron 40 años de régimen comunista soviético, período que terminó con la famosa “Revolución de Terciopelo” en 1989. En ese momento, la República Checa formaba un solo país con Eslovaquia, que obtuvo su independencia pacíficamente en 1993. Hay que señalar, sin embargo, que para la Compañía, desde el final de la Primera Guerra Mundial, han existido siempre dos Provincias, una para la República Checa y otra para Eslovaquia.

El país se caracteriza ciertamente por la altísima proporción de su población que se considera atea o sin religión: alrededor del 80%. Existe cerca de un 9% de católicos, pero, según una reciente encuesta realizada por la Iglesia católica, se estima que los católicos practicantes son un 3,5% de la población total. Generalmente se citan dos razones como origen de esta situación: la influencia de 40 años de comunismo y los esfuerzos de la nación checa por emanciparse de la monarquía de los Habsburgo, que identificaba su poder con la religión católica. La sociedad checa experimenta, pues, la fuerte tendencia a la secularización que caracteriza a gran parte de Europa. Hay que añadir, sin embargo, que el catolicismo está más presente en el este, en Moravia, que en Bohemia.

Petr Havliček afirma que esto no quita para que los jesuitas de la Provincia de BOH estén orgullosos de celebrar su 400 aniversario. Con cierta humildad, por supuesto, teniendo en cuenta el reducido número de jesuitas con presencia en cinco localidades, en tres ciudades y en dos zonas rurales. Su servicio pastoral se realiza en todas ellas desde parroquias o santuarios. En las tres zonas urbanas, que son ciudades universitarias, su atención se dirige principalmente a los jóvenes, especialmente a los estudiantes de las parroquias que lleva la Compañía. Esta labor se lleva a cabo en estrecha colaboración con el Movimiento Católico Universitario, asociación laica de estudiantes creyentes.

Que éste es su trabajo apostólico prioritario se refleja también en el tiempo que el Padre General está dedicando a visitar parroquias y capellanías universitarias. En cuanto a su presencia entre los jóvenes, cabe destacar también que el Padre Sosa visitará el centro de enseñanza secundaria de Děčin, del tipo “Nativity School”, con un programa especialmente diseñado para apoyar a jóvenes de entornos desfavorecidos. En cuanto al apostolado social, cabe mencionar la acogida dispensada a madres ucranianas y a sus hijos, que huyen de la agresión rusa a su país.

La formación de los jesuitas checos se realiza sobre todo fuera del país, excepto el período de magisterio (prácticas apostólicas entre dos etapas de estudio). Esto permite que los jóvenes jesuitas establezcan contactos con la Compañía universal durante su noviciado en Gran Bretaña o sus estudios de filosofía o teología en Polonia, Francia, Italia, España o Estados Unidos. La Provincia ha celebrado recientemente la ordenación sacerdotal de cuatro compañeros. Esto refuerza su capacidad de acompañar a jóvenes y universitarios.

Por último, señala el socio, el equipo provincial es consciente de los desafíos que debe afrontar. Están buscando, ante todo, formas eficaces de desarrollar su actividad apostólica más allá de los límites de nuestros templos. A los jesuitas les agradaría tener otro tipo de presencia en el contexto social y socio-religioso de la República Checa. Esto ayudaría a una más amplia difusión de la espiritualidad ignaciana y de los Ejercicios Espirituales, aunque la Provincia no posea centros espirituales propios.

En días sucesivos podrán seguir al P. Arturo Sosa en su recorrido por la Provincia de Bohemia y aprender mucho sobre el trabajo de la Compañía en esta parte de Europa Central. ¡Sigan atentos!

[Fotos de František Ingr - Asociacion Člověk a víra]