Fue en la 35ª Congregación General, celebrada en 2008, cuando la Compañía de Jesús se posicionó oficialmente acerca de las cuestiones ecológicas, tras una mención en un breve decreto de la 34ª Congregación General celebrada en 1995...
Los miembros de la Congregación General 36 le solicitaron explícitamente al recién elegido Superior General, el P. Arturo Sosa, revisar las prioridades o preferencias apostólicas de la Compañía de Jesús. El P. General optó por involucrar a un amplio espectro de personas en este proceso, incluyendo a los jesuitas y también a sus compañeros en la misión, laicos y religiosos de todo el mundo. Usamos el método de la conversación espiritual. Jesuitas, grupos de amigos y benefactores fueron invitados a discernir las necesidades del mundo, las llamadas del Espíritu y los caminos para que la Compañía de Jesús pueda servir mejor.
Cada Provincia Jesuita tuvo que preparar un informe de sus hallazgos. Luego, estos informes fueron llevados a las Conferencias de Provinciales de las seis regiones del mundo en las que los jesuitas están presentes. A principios de enero de 2019, junto con los Consejeros regulares del Padre Sosa, los Presidentes de las seis Conferencias Jesuitas participaron en el Consejo Extendido del Padre General con el fin de ir adelante en el discernimiento. Ellos elaboraron propuestas que el P. General le presentó al Papa Francisco el 17 de enero.
El Santo Padre, después de hacer su propio discernimiento, oficialmente le dio al Superior General y a toda la Compañía de Jesús las Preferencias Apostólicas Universales para el período 2019 a 2029.
“Las Preferencias Apostólicas Universales... ante todo han sido la respuesta de la Compañía a las necesidades de la Iglesia... Han expresado y deben expresar de modo concreto, como cuerpo apostólico universal, nuestra disponibilidad para trabajar bajo la bandera de la cruz, servir al solo Señor y a la Iglesia su Esposa bajo el Romano Pontífice. Las preferencias apostólicas nos ponen así en la tensión de buscar el bien más universal como norte de las múltiples actividades apostólicas que realiza la Compañía...
Las preferencias apostólicas universales han sido y son, por tanto, lo que indica su nombre: puntos de referencia para toda la Compañía, que la inspiran en el discernimiento en común y la planificación apostólica, a todos los niveles de nuestra vida-misión. Son, al mismo tiempo, guía para la restructuración del gobierno y el trabajo en redes entre nosotros y con otros, en la misma tarea de servir a la reconciliación.
Somos plenamente conscientes de la desproporción entre las necesidades de la humanidad a las que la Iglesia quiere atender y los recursos con los que contamos. Las preferencias nos orientan sobre cómo utilizar los recursos, evitando dispersarlos, en modo que puedan servir a la mayor gloria de Dios, como se ha intentado desde la fundación de la Compañía. Las preferencias no establecen una jerarquía de las necesidades de la humanidad o de la Iglesia sino que ponen acentos en la manera como la Compañía puede aprovechar mejor los recursos de los que dispone para servir a la misión reconciliadora de Cristo en el mundo.”
Carta del P. General Arturo Sosa, 3 de octubre de 2017