Centro del Obispo Munzihirwa – Kinshasa (RDC), 24 de abril de 2019
Centro del Obispo Munzihirwa
Kinshasa (RDC) - 24 de abril de 2019
Queridos amigos, ¡buenas tardes!
Mis queridos hijos, MBOTE NA BINO!
En primer lugar, doy gracias a Dios por permitirnos reunirnos hoy. Les agradezco sinceramente su presencia y su calurosa acogida en esta casa situada en el centro de Matonge, un barrio popular y animado de Kinshasa.
He oído hablar del Monseñor Munzihirwa o del Centro del Obispo Munzihirwa. Ahora conozco todo el bien que se hace aquí, para acoger a los niños que se separan de sus familias y que se encuentran en una situación difícil en las calles de Kinshasa. Sé que trabajan en condiciones muy difíciles y en un entorno deteriorado por la crisis. Por eso le felicito por su valentía y su dedicación. Tengan la seguridad de mi apoyo en la oración.
A ustedes, queridos amigos. Sepan que los jesuitas los aman. Les acogieron para que estudiaran, para que se formaran y se reintegraran en sus familias. Tome en serio su educación y capacitación; oren intensamente por su familia. Reza por mí como yo rezo por ustedes.
NZAMBE ABENISA BINO. BOTIKALA NA BOBOTO (Que Dios te bendiga, permanece en paz).
Noticias relacionadas
El P. General Arturo Sosa ha visitado Milwaukee el domingo 7 de abril, y trayendo consigo gran consolación para los jesuitas y los responsables apostólicos de esas tierras. El tiempo no ha sido demasiado primaveral, pero el encuentro ha resultado animado, cálido e inspirador.
Publicamos aquí para su información un artículo de la Comisión Justicia y Paz de Tierra Santa
El tiempo pasa y los recuerdos se desvanecen. Pero, ¿quién puede olvidar la terrible explosión del 4 de agosto de 2020, en el puerto de Beirut, que destruyó y dañó gran parte de la ciudad? Ningún libanés, tanto si estaba en la ciudad ese día como si...
En la vasta extensión del cosmos, donde colisionan cuestiones de existencia y significado, existe una intersección única de fe y ciencia. Una convergencia encarnada por los astrónomos jesuitas. En el observatorio del Vaticano, varios jesuitas...
Imagina algo así: finalmente has conquistado esa montaña para la que venías entrenando muchos meses, la vista desde la cima es impresionante, pero luego... ¿haces las maletas y te vas a casa? A veces, la Pascua puede parecer un poco así. Después del largo recorrido de la Cuaresma...
