Extended Council - Prayer before the Blessed Sacrament

Al final del primer día de la reunión del Consejo Ampliado del Padre General, un día dedicado a la oración, los miembros del Consejo, junto con miembros de la comunidad de la Curia General, oraron durante una hora ante el Santísimo Sacramento. Invocaron las luces del Espíritu Santo.

Los jesuitas alimentaron su meditación con extractos de tres cartas del Padre General. Les invitamos a orar desde estos mismos textos.

1. Nuestra vida es misión; la misión es nuestra vida (el 10 de julio de 2017)

En su carta a la Compañía sobre la Reconciliación el P. Nicolás sugirió preguntas que siguen siendo inspiradoras de nuestro discernimiento: ¿Dónde está Dios sufriendo hoy en el mundo? ¿Cómo está Dios trabajando en los corazones de todas las gentes para aliviar el ingente sufrimiento de los demás? ¿A qué fuentes de Vida podemos recurrir para sanar tanta muerte y restaurar los vínculos entre tantos grupos y personas que excluyen y son excluidas violentamente?

Recogiendo las llamadas, percibidas por todas y cada una de las unidades apostólicas de la Compañía, y siguiendo el impulso del Espíritu a la Compañía reunida en Congregación General, nuestra mirada se dirige a Cristo crucificado en los crucificados de hoy. Una mirada que, como la de la Trinidad, se convierte en acción amorosa encarnada en el servicio que busca la liberación de tales cruces y, en consecuencia, nos dispone a una renovación apostólica basada en la Esperanza, capaz de incidir efectivamente en la vida humana, sobre todo en la de aquellos que son pobres, indefensos y más pequeños.

Mirando a Jesús que sana, libera y entrega su vida entera al anuncio de la Buena Noticia nos disponemos, como sus compañeros, a discernir en común nuestra mejor participación en su obra. Reconocemos, sin embargo, que para ello tenemos la necesidad de comprender lo mejor posible el mundo en el que vivimos para acertar con nuestra mejor contribución a su reconciliación en las tres inseparables dimensiones propuestas por las Congregaciones Generales 35a y 36a: reconciliación con Dios, con los seres humanos y con la creación.

2. Sobre el discernimiento en común (el 27 de septiembre de 2017)

Poner en común la oraciónes otro requisito para un buen discernimiento. El grupo que se propone discernir en común debe encontrar los modos y los espacios de orar personalmente y en común de acuerdo a sus propias características. La oración personal y la oración en común mantienen la sana tensión entre el cielo y la tierra, buscando el magisque se deriva de nuestra relación con Dios y con su Palabra. Nos ayuda a tener presente que como cuerposomos servidores de la missio Dei. La Eucaristía es el modo privilegiado de la oración en común. Puede, entonces, tener un significado especial y un puesto central en los procesos de discernimiento en común. Una comunidad o un grupo capaz de celebrar la Eucaristía como fuente de vida en el Espíritu crece en su capacidad de percibir la acción del Espíritu en la historia y de sentir cómo el Señor cumple su palabra de estar con nosotros todos los días hasta el fin de la historia.

3. Discernimiento sobre las preferencias apostólicas universales (el 3 de octubre de 2017)

Ante todo han sido la respuesta de la Compañía, desde lo que ella es y con los recursos disponibles, a las necesidades de la Iglesia. Han expresado y deben expresar de modo concreto, como cuerpo apostólico universal, nuestra disponibilidad para trabajar bajo la bandera de la cruz, servir al solo Señor y a la Iglesia su Esposa bajo el Romano Pontífice. Las preferencias apostólicas nos ponen así en la tensión de buscar el bien más universal como norte de las múltiples actividades apostólicas que realiza la Compañía.

Además, desde la libertad interior, continuamente renovada a través de la vida espiritual, compartida con los jesuitas y compañeros en la misión, las preferencias apostólicas universalesse han convertido en horizontedel discernimiento en común que hace posible orientar la planificación apostólica de los recursos de la Compañía en todos sus niveles.

Las preferencias apostólicas universales han sido y son, por tanto, lo que indica su nombre: puntos de referenciapara toda la Compañía, que la inspiran en el discernimiento en común y la planificación apostólica, a todos los niveles de nuestra vida-misión. Son, al mismo tiempo, guía para la restructuración del gobierno y el trabajo en redes entre nosotros y con otros, en la misma tarea de servir a la reconciliación.

Somos plenamente conscientes de la desproporción entre las necesidades de la humanidad a las que la Iglesia quiere atender y los recursos con los que contamos. Las preferenciasnos orientansobre cómo utilizar los recursos, evitando dispersarlos, en modo que puedan servir a la mayor gloria de Dios, como se ha intentado desde la fundación de la Compañía. Las preferencias no establecen una jerarquía de las necesidades de la humanidad o de la Iglesia sino que ponen acentos en la manera como la Compañía puede aprovechar mejor los recursos de los que dispone para servir a la misión reconciliadora de Cristo en el mundo.

PRAYER – ORACIÓN – PRIÊRE – PREGHIERA – Monday, January 7, 2019

“Yo quiero que tu nos sirvas”

“I want that you serve us”

Veni, Sancte Spiritus…

-Come from the four winds, O Spirit, come breath of God.

Disperse the shadows over us, renew and strengthen your people.

Veni, Sancte Spiritus

Ven dulce huésped del alma, Descanso de nuestro esfuerzo;

Tregua en el duro trabajo, brisa en las horas d fuego.

Gozo que enjuga las lágrimas y reconforta en los duelos.

Veni, Sancte Spiritus

Del Padre Pedro Arrupe a la CG 31.

“Cuidada toda ambición de centralización, es necesaria una común planificación que muestre la unidad en la obra estratégica. En esta coordenada unidad se encuentra la raíz especial de la potencialidad para disponer la obra apostólica de un modo eficacísimo”.

“En esto nuestra Compañía tiene una posibilidad extraordinaria y mucho dudo que otras Instituciones puedan superar en este campo a nuestra Compañía. Si hay capacidad y oportunidad, hay también responsabilidad. Se nos abre aquí un campo dilatado para una sincera colaboración.”

From Fr. Adolfo Nicolás, to the new Province of Spain, June 21st, 2014.

[…] Even when our structures have been very good ones, they are structures that started 500 years ago. It’s enough! It’s time to put the Society of Jesus in a state or creativity to answer the new times. We are living in times of lots of ambiguity, complexity, and they are asking for a change or structures.

Oremos; prions; let us pray; preghiamo.

Para que el enemigo de la natura humana no nos robe la alegría: la alegría de evangelizar, la alegría de la familia, la alegría de la Iglesia, la alegría de la creación… Que no nos la robe ni por desesperanza ante la magnitud de los males del mundo y los malentendidos entre los que quieren hacer el bien, ni nos la reemplace con las alegrías fatuas que estás siempre al alcance de la mano en cualquier comercio.

Señor, escucha nuestra oración

Pour que nous fassions l’expérience de la miséricorde comme force de guérison dans nos plaies à vif, comme personnes et comme corps, abandonnant la peur de nous laisser émouvoir par l’immensité des souffrances de nos frères et sœurs et marchant patiemment avec le peuple, en apprenant de lui la meilleure manière de l’aider et de le servir.

Seigneur, écoute-nous.

For the Society of Jesus, so that we can have the face, the way of speaking, and the way of being of all peoples, all cultures, by inserting ourselves into all of them, into the specific heart of each people, to build up the Church with each of them, by inculturating the Gospel and evangelizing every culture.

Lord, graciously hear us.

PRAYER – ORACIÓN – PRIÊRE – PREGHIERA – Tuesday, January 8, 2019

In omnibus amare et servire Domino

In everything love and serve the Lord

From the letter of Fr Arturo Sosa on Life-Mission, 1Oth July 2017:

Gathering together all the calls that have been received from each and every one of the Society’s apostolic units, and following the promptings of the Spirit to the Society assembled in General Congregation, our eyes are turned to Christ crucified in those who are crucified today. Our gaze, like that of the Trinity, becomes loving action that is embodied in service that seeks to free people from their crosses. Such service disposes us for an apostolic renewal founded on hope able to make a real impact on human lives, especially the lives of the poor, the defenseless, and the smallest.

De la carta del P. Arturo Sosa sobre la Vida-Misión, del 10 de julio de 2017:

Recogiendo las llamadas, percibidas por todas y cada una de las unidades apostólicas de la Compañía, y siguiendo el impulse del Espíritu a la Compañía reunida en Congragación General, nuestra mirada se dirige a Cristo crucificado en los crucificados de hoy. Una mirada que, como la de la Trinidad, se convierte en acción amorosa encarnada en el servicio que busca la liberación de tales cruces y, en consecuencia, nos dispone a una renovación apostólica basada en la Esperanza, capaz de incidir efectivamente en la vida humana, sobre todo en la de aquellos que son pobres, indefensos y más pequeños.

Devant le Christ en Croix

Quand on s’est mis devant le Christ en Croix

Et qu’on se voit pécheur jusqu’au fond de l’être,

Qu’on se sait pardonné par le plus grand amour,

On peut affronter le malheur du monde,

On peut apporter le pardon et l’espoir au cœur de la nuit,

Annoncer une Église fondée sur Pierre, pécheur et pardonné.

Quand on rêve d’apporter la justice aux affamés,

La joie aux malheureux, la paix entre les ennemis,

Et qu’on a vu Jésus toucher les lépreux

Embrasser les enfants et sécher les larmes des mères,

On peut oser lui demander d’être admis à sa suite,

Et de marcher parmi ses disciples.

Quand on a livré sa vie au Seigneur Jésus,

Quand on engage son existence devant une décision de fond

On trouvera toujours dans le monde des frères et des sœurs,

Des hommes et des femmes sachant pourquoi ils vivent,

Et l’on verra paraître le vrai visage d’une Église

Accueillante et sereine au milieu des hommes.

Quand on a entendu les cris de détresse de la terre,

Et qu’on sent germer l’espoir aux quatre vents du monde,

On cherche à rejoindre le cœur de l’univers,

Le centre mystérieux de l’humanité

Et l’on va se mettre au service de l’Église et du Pape

Pour mieux entendre ses appels.

Quand on est lié par le cœur des frères

François-Xavier, Jean de Brébeuf, Pierre Claver

Et ceux aujourd’hui

Dans les prisons de Chine ou les bidonvilles d’Afrique,

On n’a plus peur de rester inutile dans un monde rétréci.

De tous les horizons, Dieu saura nous appeler.

Jacques Guillet s.j

Preghiera del mercoledì, 9 gennaio 2019

The grace we are asking for:

Lord, give us your grace so that your most holy will we may feel and entirely fulfilled.

La gracia que pedimos:

Señor, danos tu gracia cumplida para que tu santísima voluntad sintamos y enteramente la cumplamos.

TEXT 1: (1 Juan 4, 1-4)

Queridos míos: no os fiéis de cualquier espíritu, sino examinad si los espíritus vienen de Dios, pues muchos falsos profetas han salido al mundo.
En esto podréis conocer el Espíritu de Dios: todo espíritu que confiesa a Jesucristo venido en carne es de Dios; y todo espíritu que no confiesa a Jesús no es de Dios: es del Anticristo. El cual habéis oído que iba a venir; pues bien, ya está en el mundo.
Vosotros, hijos míos, sois de Dios y lo habéis vencido. Pues el que está en vosotros es más que el que está en el mundo. Ellos son del mundo; por eso hablan según el mundo y el mundo los escucha. Nosotros somos de Dios.

Para la reflexión and meditation:

• Amar la sencillez y la simplicidad de la carne, de lo concreto, de lo posible.
• Amar el modo concreto como Jesús se encarna, pobre y humilde, y acoger su don.
• No dejarse llevar del espíritu del mundo (mundanidad espiritual, Papa Francisco)

Text 2: (Spiritual Exercises 336, 8th rule of discernment for the 2nd week)

“When the consolation is without a preceding cause, there is no deception in it, since it is coming only from God our Lord, as was stated above. However, the spiritual person to whom God gives this consolation ought to examine that experience with great vigilance and attention. One should distinguish the time when the consolation itself was present from the time after it, in which the soul remains warm and favored with the gifts and aftereffects of the consolation which has itself passed away. For often during this later period we ourselves act either through our own reasoning which springs from our own habits and the conclusions we draw from our own concepts and judgments, or thorough the influence of either a good or an evil spirit. In this way, we form various projects and convictions which are not coming immediately form God our Lord. Hence these need to be very carefully examined before they are fully accepted or carried into effect.

For reflection and meditation:

- Pay attention to our own course of "habits" (customs, ideologies ...)

- Pay attention to the consequences of our concepts and judgments (what we take for granted ...)

- Pay attention to the good spirit and the bad spirit (the resonances that leave in us what we see, hear, read ...)

- What can make us add or diminish what comes from God and could influence in us diifferent purposes and opinions that might not be given by God.

Preghiera del giovedì, 10 gennaio 2019

“You give them something to eat.”

From the Gospel of Luke:

Jesus replied, “You give them something to eat.” They answered: “We have only five loaves of bread and two fish – unless we go and buy food for all this crowd.”

Reflection

It is the only miracle recounted in all four of the Gospels, and it has a way of capturing the imagination. The crowd consisted of the blind, deaf, lame, diseased and dying.

Les disciples lui ont remis le pain et le poisson pour qu’il en fasse ce qu’il voudrait; ils l’ont laissé faire. Lui, à son tour, a béni la nourriture et l’a remise aux disciples, une nourriture abondante, plus « puissante » que tout ce qu’ils avaient imaginé.

The disciples and the crowd were inadequate and tiny people, with inadequate resources. Yet their participation, sharing-contribution and trust led to the multiplication. Jesus’ welcome and compassion released their “power” to share!

Where are we? With the crowd, with the disciples? At times, do we feel, like the disciples, inadequate with our limited resources? Let us do what the disciples did: place our inadequacies in his hands to bless and multiply.

Reading (from the e-book: Pope Francis: Fraternal & Spontaneous, p.32)

“And then, yes, what the Church is asking of the Society – this I have said often, and Spadaro, who published these things, has grown tired of writing it – is to teach discernment with humility. Yes, as pontiff I ask this of your officially. Generally, above all, we who are part of the religious setting of life as priest and bishops often show little ability to discern, we don’t know how to do it for we have been educated with another theology that is more formal. We go as far as ‘you can or you can’t,’ as I said to the Chilean Jesuits concerning the resistances to Amoris Laetitia. Some people are reducing the entire fruit of two synods – all the work that has been done – to ‘you can or can’t.’ Help us to discern then. Certainly, someone who is not discerning cannot teach others to discern. And to be discerning, you have to enter into practice, you have to examine yourself. You have to start with yourself.”

Let us pray

This is the time of mercy. Each day of our journey is marked by God’s presence. He guides our steps with the power of the grace that the Spirit pours into our hearts to make them capable of loving.

It is the time of mercy for each and all, since no one can think that he or she is cut off from God’s closeness and the power of this tender love.

It is the time of mercy because those who are weak and vulnerable, distant and alone, ought to feel the presence of brothers and sisters who can help them in their need.

It is the time of mercy because the poor should feel that they are regarded with respect and concern by others who have overcome indifference and discovered what is essential in life.

It is the time of mercy because no sinner can ever tire of asking forgiveness and all can feel the welcoming embrace of the Father.

[Pope Francis, Misericordia et misera.]