En la Provincia jesuita de Europa Occidental Francófona (EOF), las relaciones y situaciones de colaboración son frecuentes y muy diversas: la Provincia cuenta con más de 100 instituciones, entre universidades y colegios, centros espirituales, revistas, iglesias y capillas, centros de reflexión y acción social, JRS... Muchos laicos, voluntarios o asalariados, están implicados en estas instituciones y, junto con los jesuitas, llevan a cabo la misión de la Compañía de Jesús, cada uno en su responsabilidad y vocación particulares.

El hecho de que los colaboradores estén asociados a la misión de la Compañía de Jesús es una característica esencial del impulso apostólico de la Provincia EOF. No sólo porque los jesuitas necesitan a los laicos, sino porque, en el espíritu del Concilio y del De Statu Societatis Iesu (DSS), se trata de llevar juntos la Misión de Cristo. “Profundizar el sentido y la experiencia decolaboración que estamos viviendo e identificarnos, nosotros jesuitas, comocolaboradores es la conversión a la que estamos llamados en este momento. Es una vía que conduce a encontrar nuestro papel dentro de la Iglesia sinodal, en misión”, subraya el DSS.

Muchas de las instituciones de la Provincia EOF (84 de 108 obras) están ahora dirigidas por laicos, hombres y mujeres. Los jesuitas son así colaboradores, y muchas veces, no están en una posición de responsabilidad primaria, ilustrando lo que el De Statu Societatis Iesu enfatizó con fuerza: “Somos colaboradores, no “tenemos” colaboradores”. Es una oportunidad para descubrir otras formas de servir a Dios, ya que jesuitas y laicos implicados en una obra están todos vinculados a una acción más amplia.

Para ilustrar la importancia de la colaboración, en diciembre de 2022, los hombres y mujeres laicos que colaboran en la misión fueron invitados a la Asamblea anual de la Provincia: 160 jesuitas, religiosas, amigos, colaboradores remunerados y voluntarios, hombres y mujeres se reunieron durante tres días para reflexionar sobre la colaboración. El P. François Boëdec, Provincial de 2017 a 2022, concluyó la reunión recordando la complementariedad y la riqueza de esta misión compartida:

“Si los jesuitas a menudo permiten a los colaboradores trabajar juntos, asociándolos y reuniéndolos en torno a un proyecto común, lo contrario también es cierto: a menudo, nos ayudan a los jesuitas a colaborar entre nosotros. Nos animan cuando nos cansamos, porque creen en el bien que esta pequeña música de la Compañía de Jesús puede aportar, modesta pero resueltamente, a nuestra Iglesia y a nuestra sociedad, independientemente de nuestros límites, incluso de nuestras faltas. A veces, nos ayudan a aclarar situaciones. Los consejos de amigos y colaboradores de la Compañía, francos y exigentes, son una ayuda preciosa. A veces, nos ayudan a atrevernos.”

Numerosos proyectos han sido posibles gracias al compromiso de laicos motivados y movilizados, como el Colegio Matteo Ricci, que abrió sus puertas en Bruselas en 2019, y el próximo Colegio Loyola, que abrirá sus puertas en Marsella, en el sur de Francia, en septiembre de 2025. Esta colaboración es feliz, ya que el reto es que todos -jesuitas y laicos- den lo mejor de sí mismos en la misión que se les ha confiado.

Más aún, el nombramiento de un nuevo rector laico, el Sr. Louis Lourme, para las Facultés Loyola Paris (ex Centre Sèvres) en julio de 2024, es una buena ilustración de ello: este nombramiento es un hito importante en la historia de las facultades, que celebran este año su 50º aniversario, ya que es la primera vez que un laico ocupará tal responsabilidad.

“Estoy doblemente encantado con el nombramiento de Louis Lourme como nuevo Rector. Percibo la energía y la creatividad que aportará aLoyola París por sus cualidades académicas y su experiencia en gestión. Además, tener a un laico a la cabeza de una institución jesuita está en línea con una fuerte orientación de la Compañía de Jesús, cuya misión es llevada a cabo conjuntamente por jesuitas y muchos laicos”, subrayó en esta ocasión el P. Thierry Dobbelstein, Provincial de EOF.

Compartir el carisma ignaciano

Para que esta colaboración sea fructífera, es necesario asegurar la formación en el carisma ignaciano y contar con equipos apostólicos, vinculados humana y espiritualmente a la Compañía de Jesús, formando así una red viva. Un ejemplo de ello es el viaje a Loyola Javier, ofrecido cada año a los colaboradores en la misión, para que puedan ir a las fuentes de la Compañía, y compartir el carisma ignaciano.

Estar implicados en la misma misión plantea también la cuestión del discernimiento, de escuchar juntos al Espíritu. Sin que la Compañía de Jesús abdique de su responsabilidad primera y última en las opciones y orientaciones apostólicas, es necesario implicar a nuestros socios y amigos en nuestras reflexiones y discernimientos.

Para profundizar en el tema de la Colaboración al servicio de la misión, he aquí algunos testimonios de jesuitas y laicos en vídeos (en francés).