Una nueva Provincia jesuita: la Provincia del Caribe
Lo que hoy celebramos nos reaviva el Espíritu y el carisma que en Ignacio de Loyola el Señor nos ha legado a toda la Compañía de Jesús y a todos y todas con quienes compartimos esta misión, recordándonos que nuestra morada y nuestro lugar de servicio es todo el mundo. La Provincia del Caribe es, pues, desde ya, un signo importante y fecundo, en lo particular, de esta misión universal a la que somos enviados. También, y sobre todo, un signo de la comunión que nos une como cuerpo apostólico, como Amigos en el Señor, y con ustedes con quienes compartimos también esa amistad y este servicio.
Este 31 de julio pasado, la Compañía de Jesús estableció la Provincia del Caribe - CAR - como nueva división territorial que integra a la antigua Provincia de las Antillas - ANT - (Cuba, Miami y República Dominicana) con los jesuitas del Caribe Inglés (antigua Región de Guayana y Jamaica).
Desde
el año 2008 el P. Adolfo Nicolás, Superior General, empujó con más fuerza
nuestra dimensión universal, animando a las Provincias - estructuras
territoriales de la Compañía de Jesús - a ensanchar sus fronteras. Como
respuesta a este llamado, más de 90 Provincias que existían para aquel entonces
se fueron uniendo o coordinándose hasta ser hoy poco más de 60. En nuestro caso
particular, el P. Nicolás urgió a un trabajo más coordinado entre las
Provincias y Regiones situadas en torno al Mar Caribe. De aquí nacería el
“Proyecto Caribe” y posteriormente - de una parte de ellas - la Provincia del
Caribe.
No se trata simplemente de una integración de territorios, sino de pensar y articular juntos la respuesta a la misión común. Como recuerda con insistencia nuestro actual Superior General, Arturo Sosa, es la misión la que ha guiado y guía siempre los procesos de reestructuración en la Compañía de Jesús. Hoy, la toma de conciencia de un mundo cada vez más interconectado plantea la necesidad de dar una respuesta global a los problemas más universales; y esto también a nivel Regional.
La
multiculturalidad ha sido un distintivo de la Compañía. Los primeros diez
jesuitas venían de siete naciones diferentes y de lenguas muy diversas. Al
mismo tiempo supieron insertarse en la cultura, la lengua y la realidad de cada
lugar. Hoy se nos presenta, además, el desafío de la interculturalidad y del diálogo
fundamental para la misión de reconciliación y justicia a la que hemos sido
llamados.
La nueva Provincia del Caribe surge para responder, junto a aquellas y aquellos con quienes compartimos esta misión de servicio, a una realidad que va desde las necesidades pastorales de la Ciudad de Miami en Norteamérica hasta las tierras de los Pakaraimas y Rupunumis de América del Sur en la Amazonia Guyanesa. Incluyendo, además, los desafíos apostólicos en Jamaica, Cuba y República Dominicana.
Una
oportunidad grande para ampliar nuestra mirada y crecer juntos en la atención a
los retos comunes, enriqueciéndonos desde nuestras diversidades y apoyándonos
en nuestras fragilidades. La comunicación, apoyo y trabajo juntos en un Caribe
diverso y plural - marcado además por la división dejada por las colonias - es
un elemento central de nuestra misión.
Un poco de historia: jesuitas de la Provincia de Inglaterra arribaron a Guyana desde 1856. Antes habían llegado a Jamaica, en 1837, y en 1894 se les unirían allí los primeros jesuitas de Norteamérica. En la segunda mitad del siglo XX, jesuitas de cinco Provincias de la India se integrarían a la misión de Guyana, y de la Provincia del Canadá a la misión en Jamaica.
La Compañía regresa a Cuba en 1853. La Viceprovincia Cubana surge en 1929, dependiendo de la Provincia de León. En 1936 retornará la Compañía a República Dominicana. En 1952 es creada la Viceprovincia Independiente de las Antillas, que será Provincia en 1968. En 1961 los jesuitas de Antillas expulsados de Cuba son acogidos por la antigua Provincia de New Orleans en Miami.
Hoy
21 jesuitas trabajan en Guyana y Jamaica, y 113 en Miami, Cuba y República
Dominicana.