Rezar por los supervivientes y las víctimas de abusos

“El abuso es un acto de traición, que condena a quien lo sufre... la prevención debe ser un proceso permanente de renovación de nuestro compromiso con la vida y el futuro, del que los menores deben poder depender.”

Con estas palabras a los delegados de la conferencia “Proyecto SAFE” sobre la protección de la infancia, el Papa Francisco reafirmó su llamamiento a priorizar la protección de los menores en los ministerios de la Iglesia. Durante casi una década, el Santo Padre nos ha invitado a todos a la conversión, especialmente con respecto a cómo protegemos a las generaciones futuras de los abusos.

Se invitó a las diócesis de todo el mundo a fijar una fecha para una jornada especial de oración.

• En Italia y otros países de la UE, el 18 de noviembre.
• En Irlanda, y en algunos países de África, se celebra el primer viernes de Cuaresma.
• En Japón, el segundo viernes de Cuaresma.
• En Bélgica, en abril.
• En Estados Unidos, en junio.

Otras fechas se encuentran en www.tutelaminorum.org.

Hay varios recursos de oración en línea, por ejemplo aquí.

Oración por las víctimas y supervivientes de abusos sexuales

Padre celestial

que amas y cuidas a todos tus hijos, especialmente a los más pequeños y vulnerables, te confiamos las vidas de muchos niños y adultos vulnerables, que han sufrido abusos sexuales y cuya confianza e inocencia han sido destruidas. Ayúdanos a escuchar sus gritos de dolor y a asumir la responsabilidad de tantas vidas rotas.

Te pedimos que, en sus comunidades y familias, encuentren comprensión y apoyo para que, con la ayuda de tu gracia, cicatricen sus heridas y vuelvan a conocer la paz.

Concédelo por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que compartió nuestra debilidad en todo menos en el pecado, y vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo por los siglos de los siglos.

Amen.

Oración por la sanación de los recuerdos, por Liam Lawton, sacerdote y músico irlandés

Señor, no puedo encontrar las palabras que debería decir, ni conoceré nunca el dolor, ni la profunda desesperación de las almas que han sido heridas por falta de amor y cuidado.
Esta es una oración, una súplica, para que vengas y cures suavemente las almas de todos aquellos, cuyos corazones aún sangran.
Cura el grito silencioso de aquellos que lloran durante noches y años.
Al niño que siempre llora y despierta con sueños de adulto.
Cura el dolor que nunca parece desvanecerse, reemplaza con amor la culpa de una vergüenza interminable.
Escucha la voz que anhela contar su historia, escucha las palabras, donde prevalece la integridad, escucha la verdad, donde ha fallado la honestidad.
Escúchanos ahora, invocamos tu nombre.
Cura todos los recuerdos ocultos en el lugar más profundo del dolor, reprimidos a través de años de sufrimiento.
De los recuerdos borra todos los pensamientos de miedo y fracaso con lágrimas que laven cada rostro.
Tú, Señor, fuiste despojado, magullado y golpeado, desprotegido, tan vulnerable, burlado, escarnecido, traicionado, y en la tumba donde fuiste puesto, colocamos el dolor, el odio, las heridas de la historia.

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Publicado por Communications Office - Editor in Curia Generalizia
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El Servicio de Comunicaciones de la Curia General publica noticias de interés internacional sobre el gobierno central de la Compañía de Jesús y sobre los compromisos de los jesuitas y sus partenarios. También se encarga de las relaciones con los medios de comunicación.

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