El P. General en visita a la Provincia de Australia - Bendición del edificio Kostka

Siguiendo el espíritu que anima el paradigma de la pedagogía ignaciana, el Xavier College ofrece a los jóvenes un programa que va del 6º al 12º curso de educación secundaria. La institución se presenta como auténticamente jesuita, declarando que “una educación jesuita fomenta el pensamiento independiente, la reflexión y el discernimiento”. Enero en Australia es pleno verano, y cuando el P. General visitó la institución, los alumnos estaban todavía de vacaciones. Sin embargo, el coro participó en la Eucaristía presidida por el P. Sosa, y un comité de bienvenida que incluía a otros alumnos aseguró una cálida recepción al distinguido visitante.

Un momento importante de la visita fue la bendición, por parte del Superior General, de una placa que conmemora la construcción de un nuevo edificio: el Kosta Building con su capilla. Este edificio alberga ahora a los alumnos de los cursos 7º y 8º, que antes estaban alojados en otra parte de la ciudad. El rector, el P. Christopher Middleton, señala que el nuevo edificio permitirá a los alumnos integrarse mejor en la vida del colegio. Los alumnos mayores, de los cursos 11 y 12, serán llamados a actuar como mentores de los más jóvenes. Además, habrá ventajas para las actividades extraescolares de música y deporte.

La capilla Kostka, un espacio sagrado con unos 70 asientos, incluye vidrieras de gran calidad que representan el Vía Crucis. Éstas formaban parte de la capilla del antiguo Kostka Hall, cerrado recientemente. La capilla se utilizará para las celebraciones eucarísticas de los viernes, a las que siempre son bienvenidos padres y abuelos. También proporcionará un espacio dedicado a la educación religiosa y a las actividades de la pastoral juvenil.

Una capilla, misas, actividades pastorales... ¿son todos los adolescentes australianos fervientes católicos? Esto es lo que comenta Christopher Middleton:

“Xavier se enfrenta a los mismos retos que los demás a la hora de alimentar la espiritualidad y la fe de sus alumnos en un contexto muy secular. Sin embargo, hay signos positivos. Tenemos un programa de retiros para todos los niveles y, en el último año, el retiro opcional Kairos se ofrece cuatro veces al año durante las vacaciones, y hay listas de espera. Hay un programa de servicio ignaciano muy fuerte, en el que participan la mayoría de nuestros chicos, y que se complementa con programas de inmersión con nuestros pueblos autóctonos, en Tailandia, India y Timor Oriental. La celebración de la Eucaristía desempeña un papel clave en todos los aspectos de la vida escolar, con el excelente apoyo de nuestro departamento de música. El fomento del examen ignaciano y la reflexión en general, y la vinculación, de una parte, del bienestar y la espiritualidad y, de otra, del desarrollo de un generoso sentido del servicio, ejercen una influencia significativa en los jóvenes: ellos hacen suyo el lema ‘personas para y con los demás’. Por último, nuestro programa de educación religiosa trata de promover un acercamiento inteligente a la fe que no rehúya las preguntas.”

El rector también mencionó elementos del programa de Xavier que están claramente vinculados a las Preferencias Apostólicas Universales de la Compañía. Además de los retiros Kairos ya mencionados, se ofrece un seguimiento a través de grupos de intercambio. Los elementos de la espiritualidad ignaciana están principalmente adaptados al personal. Los Ejercicios Espirituales en la Vida Ordinaria se ofrecen a lo largo del año y se cursan invitaciones para peregrinaciones a lugares ignacianos en España y Roma. El “servicio ignaciano” desempeña un papel importante: casi todos los alumnos participan en actividades de servicio con personas necesitadas. Por ejemplo, prestando apoyo educativo a los hijos de refugiados, acompañando a niños discapacitados y visitando residencias de ancianos. La Xavier Social Justice Network (Red de Justicia Social Xavier) implica a unos 200 padres en diversos servicios sociales. Por último, en la construcción de los nuevos edificios se han tenido en cuenta consideraciones medioambientales.

Para concluir, he aquí un extracto de la homilía pronunciada por el P. Arturo Sosa durante la celebración eucarística que reunió a los jesuitas y a sus compañeros/as en la misión tras la bendición del nuevo edificio Kostka.

“Debemos recordar en qué consiste realmente el poder del Señor. En su homilía de Navidad del pasado diciembre, el Papa Francisco reflexiona sobre el niño Jesús en Belén y nos dice que nuestro Dios no es tanto un dios de logros y éxitos mundanos, sino un dios de encarnación, de presencia ante su pueblo. El Santo Padre dice que Jesús ‘no elimina la injusticia desde arriba con una demostración de poder, sino desde abajo, con una demostración de amor. No irrumpe en escena con un poder ilimitado, sino que desciende a los estrechos confines de nuestras vidas. No rehúye nuestra fragilidad, sino que la hace suya.’

Nuestro Dios no es un dios que agita una varita mágica para hacer desaparecer todos los problemas, sino uno que acompaña a la humanidad herida con ternura y misericordia. Como dice San Pablo, ‘... ni la muerte, ni la vida, ni los ángeles, ni las dominaciones, ni lo presente, ni lo futuro, ni las potestades, ni lo alto, ni lo profundo, ni cosa alguna en toda la creación, podrá separarnos del amor de Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro.’

Ustedes y yo estamos invitados a confiar nuestras vidas en las manos de este Dios amoroso, especialmente en tiempos de angustia y adversidad. (...)

Siempre estamos verdaderamente en las manos de Dios, incluso cuando pensamos y sentimos que estamos solos. Pedimos hoy la gracia de recordarlo siempre, y la gracia de una fe más fuerte, para que no tengamos miedo de avanzar en el servicio a todos.”