Grandes puntales del apostolado social en la Provincia jesuítica de Jamshedpur
Por Antony Puthumattathil, SJ
Provincia di Jamshedpur
El apostolado social de la Compañía abarca un amplio espectro de actividades y obras que van desde obras asistenciales hasta las de solidaridad con los pueblos históricamente marginados y con sus luchas por lograr un cambio estructural y sistémico que alumbre una sociedad más justa y más humana. El enfoque de nuestras intervenciones y acciones sociales ha ido evolucionando y sigue madurando. Atentos al llamamiento del Concilio Vaticano II y de la Congregación General 32 en favor de la justicia, algunos jesuitas de la Asistencia de Asia Meridional abandonaron la seguridad de las instituciones y de vivir en comunidades bien estructuradas, para montar su tienda entre los pobres, uniéndose a sus luchas. La Provincia de Jamshedpur cuenta con algunos de estos incondicionales: los padres Rob Currie, Mathew Areeparampil y Stan Swamy, decidieron vivir entre los adivasis del centro-este de la India.
Robert Currie
Robert Currie trabajó principalmente en
Chaibasa. Concienció a los jóvenes Ho-Adivasi del yugo explotador y la opresión
constante que padecen los adivasi tanto en el medio rural como en el urbano. Como
consecuencia los jóvenes se organizaron en un formidable frente contra las
fuerzas explotadoras. Pero la alianza comerciantes-políticos-burócratas-intermediarios
de Chaibasa, descubrió que Rob estaba tras el movimiento juvenil y acabó
presionando al gobierno para que lo expulsara del país.
Mathew Areeparampil
El padre Mathew Areeparampil (1944-2001) trabajó dos años en el Xavier Labour Relations Institute (XLRI) de Jamshedpur, recibiendo allí dos veces el premio al mejor profesor. Pero él anhelaba llegar a la población adivasi, relegada a los suburbios de la ciudad. Acabó dejando el XLRI para trabajar con los hos de West Singhbhum. Aprovechó su convivencia con los hos para estudiar su historia, su cultura y su lengua, sacando a la luz las disposiciones legales y constitucionales que protegían sus tierras, y las que daban fuerza a los tradicionales consejos comunales de los hos.
En una ocasión Mathew escucha a un grupo de mujeres que caminaban hacia el bosque para recoger leña, entonar unas canciones de gran tristeza. Eran canciones que revelaban en su contenido espeluznantes historias de hombres hos encarcelados por falsas acusaciones con ocasión de un movimiento en favor de los derechos forestales, que tuvo lugar entre 1978 y 1980. Mathew se hace inmediatamente con los datos necesarios sobre aquellos hos encarcelados, y consigue los registros del departamento forestal de Patna y de Nueva Delhi. Sus investigaciones llevan a descubrir la indescriptible opresión de que son víctimas los hos, contra los que ya se habían incoado más de 3.700 causas por delitos menores.
Mathew presenta un recurso ante el Tribunal Supremo de la India exigiendo la liberación inmediata de los hos aún en prisión. El Tribunal Supremo llega a reconocer la falsedad de la mayoría de los casos. Finalmente, en 1983, el Tribunal Supremo ordena la liberación inmediata de 1.500 personas que permanecían encarceladas en diversas prisiones y la anulación de más de 2.000 causas incoadas desde 1960.
El gran reconocimiento que
el trabajo de Mathew obtuvo dentro y fuera de la India permitió la creación del
actual Tribal Research and Training
Centre (TRTC), en Bara Guira, a donde los adivasis de Jharkhand pueden llegar,
alojarse, sentirse como en casa, beneficiándose de programas residenciales de
formación para su concienciación y su autocapacitación. Mathew siguió
desarrollando interesantes métodos para iniciar a los aldeanos, alfabetizados y
analfabetos, en el análisis sociocultural. Aún permanecen frescas en la memoria
de todos las coloridas competiciones deportivas y de danza que se celebran cada
año en sus aldeas. El TRTC, que optó por trabajar en el campo del apostolado
social, sigue ocupándose muy activamente de cuestiones cruciales que afectan a
la vida de los hos y otros grupos marginados de la zona. Mathew supo combinar
admirablemente la investigación académica y la actividad social.
Stan Swamy
Stanislaus Lourdusamy (1937-2021), hoy conocido como el padre Stan Swamy, entró en la Compañía de Jesús en Jamshedpur el año 1959. Poco después de su ordenación, fue nombrado director, en Jamshedpur, de los Catholic Relief Services (CRS). Tras establecer la infraestructura necesaria, nombró a dos de sus antiguos alumnos gestores de los asuntos ordinarios y él se trasladó a un pueblo de Ho. Allí descubrió la calidad contracultural de los valores de su cultura, y comenzó a despertar conciencia crítica sociocultural entre los jóvenes.Quedó enamorado de los valores culturales adivasi.
Stan y sus colegas del Indian Social Institute de Bangalore (ISI-B) introdujeron a estudiantes activistas en prácticas en la filosofía de Paulo Freire, según la expone en su Pedagogía del Oprimido. Fueron cientos los jóvenes de diversas partes del sur de Asia que asistieron a los cursos de análisis social impartidos por Stan. Tras quince largos años de trabajo en el ISI-B como formador y director, Stan regresó con los adivasis de Jharkhand, su primer amor. En sus Memorias, narra una impresionante experiencia sobre el ingenio de los adivasi: la familia con la que se alojaba solía recoger mangos del árbol que tenía en el patio, pero nunca omitían dejar algunos frutos en las ramas, ¡para los pájaros!
De vuelta a Jharkhand, Stan y sus colegas crearon en Ranchi un centro de formación y de investigación social, al que dieron el nombre de Bagaicha, para contrarrestar la violencia estructural y cultural que sufrían los adivasi. Muchos adivasi han sido desplazados por la fuerza en aras del desarrollo nacional. Un estudio sobre menores sometidos a juicio, iniciado por Stan, llegó a concluir que el 97% de los entrevistados no habían cometido los delitos de los que se les acusaba. En 2017 presentó una petición de indulto ante el Tribunal Superior de Jharkhand, que sigue pendiente.
Stan, de 83 años, fue acusado falsamente por el régimen actual en el caso Bhima-Koregaon (junto con otras 15 personas). Permaneció en prisión cerca de nueve meses durante la pandemia de COVID-19. Le fue denegada tres veces la libertad bajo fianza. Finalmente, falleció a la edad de 84 años el 5 de julio de 2021.
Conclusión
La concepción y la misión del reino de Dios que transmite Jesús significan un esfuerzo que nos lleva por el camino de la humilde aceptación de nuestras fragilidades y fracturas humanas, al tiempo que las vamos trasformando, con total confianza en Dios, para hacer surgir una sociedad más humana y global ya en este mundo. Robert Currie, Mathew Areeparampil y Stan Swamy, de la Provincia de Jamshedpur, son ejemplos de la mejor manera como los jesuitas podemos hacerlo en solidaridad total con los que han sido marginados por la historia y la sociedad.